¿Qué tan distinta seria tu vida si todas las semanas vivieras con la misma intencionalidad de reflexionar sobre la obra más majestuosa ocurrida hace más de 2000 años?
Culturalmente separamos esta semana como la "semana santa" y nos tomamos el tiempo de meditar, agradecer y exaltar a Jesucristo por cumplir su magna misión terrenal de ser cruxificado, morir y poderosamente resucitar al tercer día. Oramos más de lo usual. Adoramos con más intensidad. Nos rodeamos de ambientes espirituales. Somos más movidos al evangelismo. Damos más por amor a Él.
¿Pero sabes que todo el tiempo tienes esta misma oportunidad? ¿Sabes que no tienes que esperar a una fecha del calendario especifica para hacerlo?
Cada día Dios te da mil y una oportunidad para vivir inundado en Su presencia. En cada momento puedes expresar una gratitud ejecutada en adoración por lo que el Maestro completó por Tí. Su cruxificcion y resureccion cambió el mundo de tal manera que dividió el tiempo en antes de Él y después de Él. Su ministerio terrenal fue tan efectivo que hoy tu y yo tenemos acceso a sus enseñanzas a través de lo que Sus siervos lograron en obediencia. Su amor es tan tangible que a diario pinta amaneceres, decora el cielo de estrellas y la tierra de preciosas flores para captar tu atención. Su presencia es tan real que la respiramos; nuestros pulmones se llenan de Él.
Mira esta vivencia de Jesús: "Jesús, fatigado del camino, se sentó junto al pozo. Era cerca del mediodía. En eso llegó a sacar agua una mujer de Samaria, y Jesús le dijo: ―Si supieras lo que Dios puede dar, y conocieras al que te está pidiendo agua, tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua que da vida. Todo el que beba de esta agua volverá a tener, pero el que beba del agua que yo le daré no volverá a tener sed jamás, sino que dentro de él esa agua se convertirá en un manantial del que brotará vida eterna.―Créeme" (Juan 4)
Solo en Jesús puedes experimentar plenitud de gozo a diario y no solo hoy.
Qué esta semana sea el impulso que necesita tu relación con Jesús para que de hoy en adelante lo busques, lo anheles, le adores, le hables y le ames aun más. Tu vida debe ir en pos de una vida santa y no solo una semana.